Rusia se acercó a Cuba en aparente solicitud de apoyo militar para su operación en Ucrania. Esto, una semana después de que el grupo mercenario Wagner se amotinara contra el gobierno del presidente Vladimir Putin. La situación reunió al ministro de Defensa ruso Sergei Shoigu y al ministro de las Fuerzas Armadas Revolucionarias cubanas, general Álvaro López Miera, quienes se comprometieron a participar en “proyectos de cooperación técnico-militar”, de acuerdo con la agencia de noticias Tass.
Para ir al grano, Moscú le ha pedido a La Habana que aporte personal bélico para apoyar sus maniobras en suelo ucraniano, lo que significa que sus opciones están disminuyendo luego que el dirigente wagnieriano, Yevgeny Prigozhin, protestó y amenazó con marchar hacia Moscú, luego de saberse traicionado por el jefe del Kremlin.
El militar isleño aseguró a su colega ruso que su país está dispuesto a dar su apoyo en una causa que se identificó contra el fascismo europeo, protogonizado por Estados Unidos, en abierta referencia a la operación bélica en Ucrania.
Por su parte, el Ministerio de Defensa en Moscú aseguró que Cuba es un aliado incuestionable a las políticas rusas y elogió “su actitud hacia nuestro país al demostrar una comprensión completa de los objetivos de la operación militar especial en Ucrania”.
Cabe resaltar que ésta no es la primera ocasión que los rusos hacen contacto con autoridades cubanas. A principios de este año, el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolai Patrushev, el ministro de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, y el presidente de la Duma Estatal, Vyacheslav Volodin, visitaron la isla.
Recientemente, el primer ministro cubano, Manuel Marrero, visitó Moscú donde se reunió con Putin quien se comprometió a mantener un abastecimiento fluido de petróleo a la isla, además de conferirle la Medalla de la Orden de la Amistad.
Esta situación tiene lugar una semana después de que el líder wagneriano Yevgeny Prigozhin, protagonizara una rebelión contra Putin, luego que lo responsabilizara de lanzar un ataque, a través del ministro Shoigu, contra uno de sus campamentos en el que murieron 30 de sus combatientes.
Las filas del Wagner respondieron enviando fuerzas apoyadas por tanques hacia el Kremlin. El fugaz alzamiento mercernario fue impedido por el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, quien convenció a Prigoshin de refugiarse en su país y evitar un baño de sangre interno.
De acuerdo con Mikhail Komin, de la Carnegie Endowment for International Peace (Fundación Carnegie por la Paz Internacional) señaló que el amotinamiento de Prigozhin “reveló la escala de la crisis dentro de las fuerzas armadas rusas, que están cansadas por los constantes fracasos de la guerra, y decepcionadas por las élites militares y de seguridad”.
Por su parte, el ex asesor senior de Putin, Vladislav Surkov,, advirtió que este tipo de “contratistas bélicos” son una amenaza importante para la integridad de Rusia, Asimismo, agregó que “estos ejércitos privados como el Grupo Wagner podrían convertir a Rusia en una “zona tribal euroasiática”.
Con información de Miami Herald, El Clarín y CNN.
Sólo para que lo sepan: Según medios de comunicación latinoamericanos ya hay mercenarios cubanos que se entrenan en suelo bielorruso, animados por una buena paga y la postulación a la ciudadanía. Esto después de que el Kremlin anunciara que a todo aquel extranjero que preste sus servicios militares tendrá derecho a esas prestaciones sin siquiera titubear con cuestionamientos. Este decreto tiene lugar a poco más de ocho meses cuando el ejército ruso convocó a ciudadanos de entre 18 y 27 años a luchar en Ucrania, ocasionando una avalancha de refugiados que buscaban más bien internarse en la Unión Europea que unirse a las filas del operativo especial. De acuerdo con algunos analistas políticos y militares, citados por la prensa rusa, como el mayor Dmitry Zaitzev, estos voluntarios recibirán un pago único de 195.000 rublos (2.419 dólares) pero, a quienes entren en combate directo en Ucrania, se les pagará 204 mil rublos, es decir, 2 mil 531 dólares cada mes. Tampoco es la primera vez que Cuba envía fuerzas al exterior, En noviembre de 1975 fue enviado un batallón de 25 mil soldados del Ministerio del Interior a Angola, al mando de los comandantes Raúl Díaz Argüelles y Leopoldo Cintra Frías. En Granada, más de 700 cubanos se unieron a la defensa de la isla al lado de 1,500 soldados granadinos en la ofensiva lanzada por Estados Unidos el 25 de octubre de 1983.