En un contexto marcado por tensiones y desafíos globales, el Reino de Marruecos ha reafirmado su compromiso con los principios democráticos y los derechos humanos mediante la firma, en la República Dominicana, del Comunicado Conjunto sobre la situación en Venezuela.
Durante la ceremonia de investidura del Presidente dominicano Luis Abinader en Santo Domingo, que contó con la representación del Rey Mohammed VI por parte del Ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita, Marruecos se distinguió como el primer país africano en sumarse a la declaración internacional que condena la represión en Venezuela tras la controvertida reelección de Nicolás Maduro.
El documento, respaldado por cerca de treinta países, incluidos Perú, Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, Países Bajos, Italia, España, Argentina, Chile, Costa Rica, Guatemala, Paraguay, República Dominicana y Uruguay, no solo denuncia la opresión que se cierne nuevamente sobre Venezuela, situación que persiste desde el término del mandato de Hugo Chávez en 2013, sino que también exige medidas concretas para asegurar la transparencia electoral. En particular, el comunicado insta a la publicación inmediata de todos los actas originales y a la realización de una verificación imparcial e independiente de los resultados electorales, preferentemente por una entidad internacional reconocida.
Hay que recordar que, desde el comienzo de la crisis en Venezuela hace más de 5 años, la postura de Marruecos ha sido coherente y firme, apoyando invariablemente a las fuerzas de la oposición democrática. Este apoyo se ha manifestado en diversos momentos clave, como en enero de 2020, cuando Marruecos expresó su respaldo a Juan Guaidó tras su reelección como Presidente del parlamento venezolano.
Además, el Reino ha sido un firme defensor de las aspiraciones legítimas del pueblo venezolano hacia la instauración de un estado verdaderamente democrático, siendo el primer país africano en recibir oficialmente en julio de 2019 al enviado especial de Guaidó, José Ignacio Guédez.
La posición de Marruecos respecto a la crisis venezolana se alinea con la de la mayoría de los países sudamericanos, europeos y con las directrices de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), que han cuestionado abiertamente la legitimidad de la reelección de Maduro.
Cabe señalar que Venezuela, bajo la dirección de Maduro, es uno de los países más firmes, constantes e importantes que apoyan al Polisario y continúa en esta línea a pesar de la oposición de destacadas figuras políticas locales que han insistido en que Caracas no se beneficia de mantener su respaldo al movimiento separatista y que, por el contrario, el país sudamericano se beneficiaría enormemente al desarrollar relaciones fuertes y positivas con Marruecos.
Por otro lado, es importante destacar que Argelia fue uno de los primeros países en declarar a Maduro ganador de las elecciones, demostrando así su rechazo a los principios fundamentales de la democracia y del derecho internacional.
Por último, las acciones del tirano de Caracas contradicen los eslóganes supuestamente democráticos que ha proclamado incansablemente, siendo el apoyo a la falsa “causa saharaui” la expresión más absurda de estos.